Visitas de la última semana

domingo, octubre 30, 2011

De la ciudad a la jungla

20111029_Gato Pachis

Pachis tiene un aspecto de mercenario. No es para menos, en esta jungla ha tenido que ganarse una posición a zarpazos entre sus iguales silvestres. Atrás quedó aquel minino dulce, tímido y aristocrático que trajo Pedro de Guadalajara. Lejos quedó aquél gatito atigrado y atildado cuya estampa era digna de una hoja de calendario. Ahora luce como un corsario redomado con sus musculosos carrillos inflados, ojo de vidrio, mano con garfio, pata de palo y perico al hombro. Cuando recién llegó a la colonia era dificil hacer que se acercara siquiera al umbral de la puerta. Las contadas ocasiones que salía era siempre víctima de bullying de parte de un gato negro con un aspecto lúgubre y una mirada torva que producía un efecto bastante amedrentador en el ánimo de sus pobres víctimas. Ahora todo es distinto. A Pachis no le gusta estar en casa más de lo necesario, esto es, el tiempo que le toma devorar su plato de comida y maullarle un rato a Gladis solicitándole más. Después sale de casa con un paso lento cargado de autosuficiencia, seguro de que encontrará a la vuelta de la esquina lo que le es conocido. Lo veo marchar con el ánimo dispuesto para enfrentar cualquier gato negro que amenace su territorio. De vez en cundo extralimita su arrojo y llega a casa con colgajos de pellejo colgando de sus cachetes o cojeando marcadamente con una pata inservible. Pachis es un gato libre, independiente, casi silvestre, poco aficionado a los humanos y sus melosas caricias, y paciente con su afiebrado compañero canino de nombre Dobby. Además, es la única mascota que continúa viviendo en la casa de Reforma. Las gordas viven ahora en el rancho de Chely y Paco vive en la casa de doña Maty, por consiguiente, Pachis es ahora el rey y el capo cara cortada.

domingo, octubre 23, 2011

El Niño Amigo

Niño, nuestro perro boxer murió el jueves. Kory fue la que eligió este extraño nombre para un perro de su raza. Pero tuvo razón. Dentro de ese gran cuerpo esbelto de pelambre corto color miel hubo siempre un corazón de niño. Fue enterrado al lado de su compañero y gran amigo Patón. Su plato de comida luce ahora gris y solitario al lado de su último costal de croquetas. Fue un gran compañero de la familia. Conocido por su gran hiperactividad y fuerza física tenía también un desbordado corazón de melón. Atrás quedó ya su andar cansino, su vista nula, su mundo de resonancia y su pelo cano. Ahora lo veo corriendo ligero en un campo de amapolas y girasoles, deteniéndose a olisquear entre abejas y mariposas los efluvios de roedores y lagartijas (que era algo que disfrutaba), reencontrándose a cada paso con la antigua nitidez de las formas vestidas con sus vivos colores. Ojalá se reencuentre con su amigo Patón. Sabrá reconocerlo al escuchar su grave y aterciopelada voz. Divisará desde lejos sus patotas y orejotas aprovechándose para esto de su vista de lince de reciente adquisición. Adiós amigo Niño.

domingo, octubre 09, 2011

Entre Reforma y Villahermosa

Gladis y Yo llegamos este fin de semana a Reforma, a la colonia Las Garzas. A ambos nos gusta la calma y el silencio que impregnan su caserío. Aquí venimos a recupera la energía que nos arrebata de lunes a viernes el tráfico de Villahermosa y el trajinar diario de las actividades individuales de sus acelerados habitantes. Mientras muchos le rehúyen a la soledad como si fuera el coco nosotros la buscamos por los beneficios que proporciona a todos aquellos que le piden consejo. Nada hay más gratificante que regalarnos un tiempo de calidad a nosotros mismos a través de una sabrosa conversación de sobremesa con la persona que amamos, o a través de la lectura de un libro que nos enseñe y nos ayude a entender un poquito mejor nuestra compleja sociedad, o simplemente recostarnos para escuchar música o ver televisión planeando en los intermedios el paso siguiente que daremos en nuestra vida.

domingo, octubre 02, 2011

La lectura

Hace  años, lo que más me interesaba de la lectura era su carácter informativo. Esta característica siempre fue desde mi época de estudiante la herramienta más valiosa. En este sentido, la lectura que buscaba debía cumplir la premisa de servirme de auxiliar en la resolución de problemas y de apoyo para comprender mejor el mundo. Definitivamente esta parte continúa siendo importantísima en mi vida pero hace tiempo que dejó de ser la única. En estos años, la parte de la lectura que más disfruto y que  me hace sentir más vivo es la parte expresiva del lenguaje. Claro que importa el contenido pero importa igual el estilo. Lo segundo es lo que mueve las emociones. Va un ejemplo:

“Vuelvo hacia todos lados y miro el Llano.Tanta y tamaña tierra para nada. Se le resbalan a uno los ojos al no encontrar cosas que los detenga. Sólo unas cuantas lagartijas salen a asomar la cabeza por encima de sus agujeros, y luego que sienten la tatema del sol corren a esconderse en la sombrita de una piedra. Pero nosotros, cuando tengamos que trabajar aquí, ¿qué haremos para enfriarnos del sol? Porque a nosotros nos dieron esta costra de tepetate para que la sembráramos.”

El Llano en llamas. Juan Rulfo.