La necesidad de engañar...¿o ser engañados?

"El error, cuando satisface una necesidad, rehúye los hechos". He comprendido, con la experiencia que me ha dejado la edad y mi escasa lectura, esta frase que escribió Jean Francois Reverte. He intercambiado la palabra “error” por la de “mentira” para aplicarla mejor a las circunstancias que me rodean con buenos resultados. Por ejemplo, en mi post anterior mencionaba los hechos que ocurren en Tabasco y la insistencia de las autoridades en NO vincularlos (error) con el taponamiento del río Grijalva. ¿Qué necesidad satisface la autoridad con esta separación de hechos? Bueno, simplemente no asustar a la población y evitar que más de medio millón de habitantes entre en pánico. ¿Se justifica? No lo sé. Los responsables de advertir a la población se sienten creo yo, como los vulcanólogos ante la encrucijada de ordenar una evacuación masiva de la ciudad ubicada en las faldas de un volcán muy activo. Podría mencionar otros muchos ejemplos que se ajustan perfectamente a esta situación. En el trabajo y en la política es muy frecuente toparse con esta elección: Rehuír a los hechos para satisfacer una necesidad individual o de grupo. Esto no es bueno porque antepone las necesidades de los individuos antes que al cumplimiento de reglamentos y normas. En otras palabras, si los hechos son incriminatorios o perjudiciales o ante la sospecha de que lo sean, queda siempre la opción de negarlos o justificarlos (mentir) por la simple e imperiosa necesidad de supervivir a costa de lo que sea, y casi siempre se logra. Se llega a creer la mentira o cuando menos se pone en duda la verdad, aunque los hechos estén en video. Me cuesta trabajo entender la facilidad con que a veces somos engañados o cuando menos confundidos.

Los hechos contra los dichos

Los Dichos:
No hacer caso a la rumorología. Esta es la frase utilizado por los medios de comunicación para exhortar a la población de Villahermosa a no hacer caso al rumor cada vez mayor que circula entre los habitantes por el riesgo que representa el taponamiento del río Grijalva para el estado de Tabasco. No hagan caso a los enemigos del pueblo tabasqueño que hacen circular esos rumores asesinos –claman las autoridades. Las presas de malpaso y peñitas se encuentran en perfecto estado y están paradas (sic) son los argumentos que esgrimen los “enterados”. Yo he optado por permanecer con el pico cerrado so pena de ser etiquetado como un enemigo (asesino) del pueblo tabasqueño.
Los hechos:
Los ríos Samaria y Carrizal principales ramales del río Grijalva que rodean a la ciudad de Villahermosa, antes desbordados y causantes de la reciente inundación, ahora se encuentran secos –primera vez en 23 años que los veo así.
El Gobernador del estado insiste en que la contingencia no se ha levantado y anima a la población a permanecer alerta –dizque por los frentes fríos que faltan por venir.
Insiste en que los miles de costales con arena ubicados estratégicamente en la reciente contingencia a la rivera de los ríos no sean retirados bajo ninguna circunstancia.
El Gobernador anuncia un plan inmediato (inédito) para colocar 40 kilómetros de bordos adicionales de 1.8 metros de altura en las márgenes de los ríos y en lugares estratégicos.
El Gobernador anuncia la creación de un plan de evacuación (inédito) con capacidad para movilizar a 400 mil personas. Argumenta que esto es solo por precaución ya que la información que Él recibe de la Comisión Nacional del Agua respecto de los pronósticos de “lluvias” no han sido muy confiables en el pasado.
La armada, la marina, PEMEX, CFE, y la industria privada trabajan a marchas forzadas 24 horas al día para abrir un canal de 100 metros de longitud y 200 de ancho para lo cual se ha creado una ciudad flotante en la recién desaparecida población de San Juan Grijalva Chiapas.
Se estima que la presa “hechiza” tiene una capacidad para 12 millones de metros cúbicos de agua. En la presa Peñitas (corriente abajo) un centímetro de nivel en su embalse equivale a 3 millones de metros cúbicos de agua. La estrategia es desalojar toda el agua que le queda a la presa Peñitas (no sé cuanta tiene aún pero que irá a parar sin remedio a Villahermosa) para hacerle espacio a “toda el agua” almacenada en el embalse hechizo desde el 4 de noviembre (lógicamente de mayor capacidad que la de peñitas).
Cada vez va siendo mayor el rumor por la incongruencia entre lo dicho y lo hecho. Mi temor que inició desde el 5 de noviembre se esta confirmando…Entonces nadie hablaba de esto…ni siquiera lo imaginaban. Ahora, muchos ya están decidiendo salir de la ciudad.

Lo que no se dice

Un día antes de que empezaran a bajar los niveles de ríos y lagunas de Tabasco y Chiapas –4 de noviembre –sucedió el desgajamiento del cerro en la población de San Juan Grijalva Chiapas que barrió y sepultó a los pobladores con todo y sus casas. La primera noticia que escuche de este evento fue en el radio la mañana siguiente en el trayecto a mi trabajo. La noche de ese día me di cuanta cabal de la magnitud y sus probables consecuencias. El derrumbe del cerro había tapado por completo el cause del río Grijalva entre las presas hidroeléctricas de peñitas y malpaso. El dique provisional creado por la naturaleza y que cortó de tajo el cause del río mide 800 metros de largo y 130 metros de alto. Inmediatamente dio un brinco mi corazón al pensar en las consecuencias de este cataclismo. Si el dique es más grande que la presa que esta corriente abajo –peñitas –existe un gran riesgo de que al llenarse el embalse se colapse la “cortina” de arena mal compactada por la presión del agua. Pensé con apremio en convencer a Gladis que se fuera con Ale a Gdl hasta que se resolviera este asunto. Me tranquilicé pensando en consultar al siguiente día a los arquitectos e ingenieros civiles del complejo sobre este tenebroso asunto. Al siguiente día todos los consultados me juzgaron de loco alarmista. Al tercer día de colapsado el cerro, aquellos mismos incrédulos “especialistas” estaban ahora alarmados al ver que los ríos antes derramados, estaban ahora casi secos. La falta de agua en su cause es tan severo que existe el peligro de que los dos complejos mas grandes de México –cactus y nuevo PEMEX –paren sus procesos totalmente con el impacto económico que ya conocemos por los recientes atentados a las instalaciones de pemex. A los cinco días después del desgajamiento del cerro, se reunieron en México los más connotados ingenieros de la UNAM, PEMEX, CFE, CNA y Gobiernos estatales y federal para estudiar detenidamente el “caso” y buscar la mejor estrategia para evitar el inminente desastre que empequeñecería las consecuencias y pérdidas de las recientes inundaciones de los estados de Chiapas y Tabasco. De esto se habla poco en los noticiarios, todo esta concentrado en el rescate de los cuerpos de los habitantes de San Juan Grijalva. ¿Hasta donde es técnica y moralmente recomendable mantener oculto este asunto a la población que se vería afectada si la estrategia no resulta? La estrategia es abrir un canal para restablecer el cause del río. Trabajará la armada y la marina las 24 horas al día con maquinaria pesada durante 40 días con el fin de ganarle al destino. El nivel del agua en la represa sube 30 centímetros al día según datos oficiales. El reloj sigue avanzando…el riesgo también. Claro que estoy inquieto ¿Estaré siendo alarmista? ¡Si contara con mayor información! ¿Qué hago?. Ni modo, es el precio que tenemos que pagar por vivir en una sociedad Orwelliana. Todos los días escucho y veo los noticieros con el fin de decantar la poca información “técnica” que me ayude a tomar la correcta decisión.

El recuento

Difícil situación para un millón de tabasqueños y no pocos chiapanecos. Las historias vividas por la gente durante los días de la inundación corren de boca en boca y por cientos. Está el relato de un hombre que se inundó cuatro veces al irse al agua los cuatros primeros albergues que lo cobijaron. Esta la historia de la joven embarazada que por la impresión –seguramente – se le anticipó el parto. Fue una odisea conseguir transporte –los choferes del transporte público estaban atareados poniendo a salvo su propia familia y patrimonio. El siguiente paso fue aún más difícil, ubicar un hospital fuera del agua que recibiera a su hijo(a)…y lo logró. Pero le faltaba lo peor, perdió a su bebé durante el parto. Luego como corolario, no encontraba tierra seca para sepultarlo. Están la historia de las familias separadas en los momentos apremiantes de los rescates al grito de ¡mujeres y niños primero! Así, los hijos, mamás y papás fueron puestos a resguardo en albergues diferentes. Por otro lado, están las historias de los “vivos”, los que hacen fila más de una vez para recibir la misma cantidad de despenas. Los polleros que hacen su agosto llenando trailers de centroamericanos que etiquetan humanitariamente como “ayuda para los hermanos tabasqueños”. Los rumores fluyen como los mismos ríos que se desbordaron; que si fue culpa de las presas, que si fue culpa de los bordos, que si mienten sobre la cantidad de muertos, etc., etc. Por fin el puente aéreo se pudo establecer, los helicópteros vuelan por el cielo tabasqueño llevando la ayuda a las rancherías más alejadas. Las rancherías más cercanas son abastecidas mediante embarcaciones de pequeño calado. Las toneladas de víveres que entran a tabasco enviadas de todos los estados de la república son recibidas en la ciudad deportiva de Villahermosa por la armada y la marina. Desde aquí es distribuida a todo el estado por la maquinaria de transporte aéreo y terrestre federal. Ya es de todos conocido –en Tabasco –que el único convoy de ayuda que traía remitente –además de ir custodiada por policías armados –es el enviado por el gobierno del DF. Uno de los remitentes fue el municipio de Macuspana tierra de Andrés Manuel López Obrador. El segundo convoy enviado del mismo origen y también con remitente ya no gustó al gobernador tabasqueño que pa’ pronto la hizo de tos.
Nuestra casa de Villahermosa también se fue al agua. Nuestros inquilinos salieron por piernas al segundo día de refriega. Al siguiente día de su salida ya tenía como 70 centímetros de alto el nivel de agua en toda la colonia. Les condonamos un mes de renta para gastos de pintura y limpieza. Aún así, nos fue bastante bien.

Agua, agua y mas agua

Salimos librados de este diluvio que azotó al estado de Tabasco y Chiapas. La colonia petrolera en la que vivimos permaneció estoicamente a flote aún en contra de los pronósticos pesimistas de algunos alarmistas. No sucedió lo mismo en la ranchería de la cual la colonia forma parte; aquí el embate de la naturaleza fue implacable. Calculo que el nivel subió 1.5 metros como mínimo en los terrenos más bajos de esta ranchería. Fuimos menos afortunados con nuestra casa de Villahermosa; nuestro inquilino se vio en la necesidad de salir antes de que el agua llegara a 1.5 metros de altura que fue el nivel registrado en esa zona según versiones de nuestros antiguos vecinos. Fue un evento catastrófico sin lugar a dudas; todo intento de evitar este desastre fue rebasado. Es imposible resistir a la naturaleza cuando esta reclama lo suyo. Fueron muchas las familias que no tomaron en serio las advertencias de evacuación que con tiempo fueron lanzada por los medios de comunicación. También es cierto que se inundaron colonias que tradicionalmente fueron respetadas por el agua en cada una de las inundaciones anteriores. Villahermosa es un caos, hace falta agua, gasolina, los alimentos escasean, muchos alberges (ya con damnificados) se fueron a pique, prolifera la rapiña, aparecen usureros y gente sin escrúpulos que lucran con el sufrimiento y las necesidades extremas de la gente, todo esto es coronado por la falta de energía eléctrica en la mitad de la ciudad. Se estima que un 80% de la superficie tabasqueña esta en el agua, habiendo áreas localizadas que tienen una profundidad de hasta 4 metros –una de ellas, la Terminal de autobuses de segunda de Villahermosa. Yo aún ando sufriendo por conseguir gasolina, el coche anda rodando ya con el último aliento. En Reforma se agotó el combustible desde la semana pasada, los teléfonos no sirven (Telmex y celulares). Lo único rescatable de todo este desastre es la solidaridad de los particulares de otros estados para con las poblaciones de Chiapas y Tabasco, así como la armada y la marina de México. Para todos ellos mi reconocimiento.