Pobre política

Quien no recuerda el intento desafortunado del gobierno por desaforar al Peje y sacarlo de la contienda política por la presidencia del 2006. Quien no recuerda el recurso infantil usado que consistía en un supuesto desacato judicial que de resultar cierto merecía cuando mucho una falta administrativa que se saldaba con el pago de unos cuantos salarios mínimos. Quien no recuerda el atolladero en que se metió el mismo gobierno al negarse el Peje sagazmente a pagar esa multa. Él quería definitivamente ser encarcelado para aparecer ante la opinión pública como un perseguido político, y logró esto último gracias a la estúpida estrategia orquestada por no se que retrasado mental. Que tan desesperado estaría el gobierno que el mismo PAN optó por pagar la multa y terminar de una vez con la pesadilla y evitar seguir siendo el agente de propaganda de su principal adversario político. No cabe duda que el peor enemigo de este gobierno además del Congreso de la “Unión” ha sido él mismo.
Después de este afortunado golpe dado por el Peje –logrado más por desacierto de sus contrincantes que por acierto de él mismo- y su renuncia de la Jefatura de Gobierno del DF, cayó en el anonimato. Ya fuera de los reflectores que lo siguieron fielmente en todas sus conferencias matutinas por el hecho de ser Jefe de Gobierno, ahora ha permanecido en el más completo anonimato recrudecido por el poco apoyo de los guías morales del PRD Cuahutemoc Cárdenas y Porfirio Muñoz aliados entre sí una vez más con objetivos aún poco claros.
De los precandidatos del PAN, Felipe Calderón es el que se ve con mayores posibilidades. De Santiago Creel tengo la impresión de que es demasiado inocente y sin recursos para convencer. De Alberto Cárdenas no se nada, solo que es muy parco y tiene bigote.
Los políticos del PRI se cuecen aparte. Roberto Madrazo y Arturo Montiel tienen una ambición desmedida de poder y cuentan también con muchos recursos deshonestos: mentirosos e hipócritas. Que nos espera?.